La diabetes es la enfermedad que cursa con un exceso de glucosa (azúcar) en la sangre y que el organismo no puede controlar. Esto puede ser causado porque la función del páncreas de producir insulina (hormona encargada de que el azúcar que se encuentra libre en la sangre entre a las células de nuestro organismo para aportarles la energía) es nula o insuficiente.
Son varios los factores que van a actuar sobre la susceptibilidad del individuo a padecer diabetes. Unos son los denominados factores de fondo, que son características propias del individuo y que no se pueden modificar, como la edad o los antecedentes familiares con diabetes; y los otros son los factores de riesgo, como pueden ser el sedentarismo, la dieta, la obesidad, los altos niveles de colesterol...
Actualmente la diabetes afecta en España a cerca de 6 millones de personas y más de 400 millones a nivel mundial, además debido fundamentalmente a los nuevos hábitos de vida sedentarios y la mala alimentación, las cifras de los afectados por la diabetes son cada vez más altas, y lo peor es que se prevé que siga en aumento.
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Las personas con diabetes van a tener que prestar una especial atención al control de su glucemia, pero también lo tendrán que hacer con su salud bucodenta,l para que no se vea afectada dado que la diabetes incrementa el riesgo de sufrir determinados problemas bucales que os explicamos a continuación:
Enfermedad periodontal
Una de las complicaciones más frecuentes de la diabetes después de las enfermedades cardíacas, derrames y problemas renales es la enfermedad periodontal (enfermedad de las encías). Los pacientes diabéticos que no gozan de una buena salud bucal van a ser entre 2 y 3 veces más susceptibles a desarrollar una periodontitis crónica.
El no llevar una buena higiene bucal provoca la acumulación de la conocida placa bacteria que va a derivar en inflamación e irritación de las encías. Si no se les presta atención a estos primeros síntomas o no son tratados a tiempo, puede derivar en un cuadro clínico mucho más importante, la periodontitis o enfermedad periodontal. Esta se caracteriza por la colonización bacteriana de los tejidos, ligamentos y superficies dentales de la boca, que puede llegar a provocar la destrucción del hueso, movilidad y hasta la caída de los dientes.
Caries
Cuando se produce un aumento de glucosa en la saliva las bacterias que se encuentran formando parte de la placa bacteriana de nuestros dientes, pueden aumentar su actividad llegando a formar caries de una manera más agresiva en aquellas personas con diabetes. Así pues, debemos tener en cuenta que a mayor nivel de azúcar en sangre, mayor será riesgo de fortalecer la placa bacteriana y en consecuencia, la formación de caries.
Aftas
Un nivel elevado de azúcar en sangre puede influir en la aparición de aftas, unas pequeñas úlceras o llagas blanquecinas que pueden llegar a ser muy dolorosas. Por otro lado, el descontrol glucémico hace que el pH de la saliva fluctúe, creando el escenario perfecto para desarrollar una infección por hongos o la también denominada candidiasis bucal.
Xerostomía
El síndrome de la boca seca es otro de los problemas más comunes entre los pacientes con diabetes. La producción salivar de las glándulas se reduce, y como consecuencia perdemos la capacidad de la saliva de “arrastrar” las bacterias y de neutralizar los ácidos que se encuentran en nuestra boca. Prescindir de estas funciones no va a jugar a nuestro favor, pues aumenta considerablemente el riesgo de padecer caries.
Existen fármacos que nos pueden ayudar a hidratar nuestra boca en forma de colutorio, gel, spray... y otros tratamientos como los sustitutos de saliva. Pero sin duda el tratamiento estrella para tratar la xerostomía siempre va a ser extremar la higiene dental, así como aumentar la ingesta de agua diaria.
Susceptibilidad a infecciones
De nuevo, los valores altos de azúcar en sangre van a hacer que los pacientes con diabetes vean afectado su sistema inmunitario, pues los glóbulos blancos tienen limitada su capacidad para hacer frente a una infección. No obstante, también se tendrá en cuenta que el diabético mal controlado estará expuesto a un mayor riesgo que un diabético bien controlado. Y en general se deberá tener especial cuidado, pues teniendo en cuenta el tipo de intervención al que pueda ser sometido, será necesario pautar cobertura antibiótica.
CONSEJOS
Como hemos visto, las personas con diabetes tienen unas necesidades especiales que desde el dentista han de ser cubiertas. Mantenga informado a su profesional de confianza sobre el estado de su salud o si ha sufrido cambios de una revisión a otra. En Proxidental aconsejamos que incluso en ausencia de sintomatología, se acuda a la consulta regularmente para poder tener un control exhaustivo de la cavidad oral, y en caso de ser necesario, poder llevar a cabo el tratamiento que solucione el problema y evite llegar a cuadros más importantes. Como siempre, su salud y su sonrisa son lo primero.